Un trágico incendio en el Cañón Rosas Castellanos, de la colonia Sánchez Taboada, dejó a una persona calcinada, un niño de un año y un adulto gravemente heridos, además de cuatro viviendas de madera consumidas por el fuego.
El siniestro ocurrió durante la madrugada, cuando fuertes vientos ocasionados por la Condición Santa Ana propagaron rápidamente las llamas desde la vivienda donde inició el fuego hacia las casas aledañas, explicó Sergio Ríos, supervisor del Sector 4 de Bomberos. En la primera vivienda, los rescatistas encontraron el cadáver calcinado de una persona, identificada por vecinos como la madre de familia que intentó salvar a su esposo e hijo.
El niño sufrió quemaduras en el 9% de su cuerpo, mientras que el padre presenta lesiones en el 90% de su piel. Ambos fueron trasladados por paramédicos de la Cruz Roja a un hospital, donde permanecen bajo atención médica especializada.
Baltazar Ignacio Martínez, vecino afectado por el incendio, lamentó que él y las diez personas que vivían en su hogar lo perdieron todo. “Nuestro patrimonio quedó reducido a cenizas. No sabemos cómo vamos a salir adelante”, expresó.
Mientras bomberos sofocaban el incendio principal, se produjo otro fuego a unas cuadras de distancia. Este segundo siniestro no dejó víctimas. Las autoridades siguen investigando las causas del primer incendio, mientras vecinos afectados piden apoyo para reconstruir sus vidas tras la tragedia.
