LA NOCHE DE LOS NAHUALES || Benjamín M. Ramírez
#Opinión Los súbditos esperaban y rogaban por las lluvias. La sequía era ya insoportable, las presas estaban secas, familias enteras clamaban por agua, pero el rey estaba extraviado en sus redes, entre declaraciones y falsas preocupaciones, en selfies que agrandaban su inflado ego, con la mirada perdida en su paupérrimo propósito por querer gobernar todo.