En un macabro hallazgo, la mañana de este miércoles fue encontrado un cadáver desmembrado dentro de un vehículo estacionado en el Cañón de la Pedrera.
Policías municipales localizaron un automóvil tipo sedán con la cajuela abierta, en cuyo interior yacía el cuerpo de un hombre robusto, al que le habían cercenado la cabeza y las manos.
Junto al automóvil, los oficiales encontraron la cabeza y las manos cercenadas, así como una manta con un mensaje amenazante, dirigido a un sujeto conocido como “Congo”, a quien se acusa de atacar por la espalda. Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si la cabeza y las manos corresponden al mismo cuerpo hallado en la cajuela. Tampoco hay información sobre los responsables que dejaron los restos en ese sitio.
En otro incidente violento registrado en las últimas 24 horas, Edgar Arturo, de 30 años, fue asesinado al salir de la penitenciaría. Según el testimonio de su esposa, los agresores, identificados como Simri, de 35 años, y Odilón, de 29, estuvieron desde las 8 de la noche esperando la salida de Edgar. Al obtener su libertad, fue atacado a balazos, recibiendo heridas en el abdomen que le causaron la muerte.
Los presuntos responsables huyeron en un Nissan Altima gris, el cual abandonaron cerca del sitio del atentado para luego intentar escapar a pie por el bulevar Federico Benítez, donde finalmente fueron detenidos por la policía. La esposa de la víctima identificó a los atacantes, afirmando que habían conversado con ella mientras aguardaban la salida de Edgar del centro penitenciario.
Estos eventos violentos se suman a una jornada que dejó cuatro personas asesinadas en 24 horas, incrementando la cifra de homicidios a 47 en el mes de noviembre y elevando el total anual a 1,581 víctimas. La ola de violencia que azota Tijuana sigue en aumento, generando una creciente preocupación entre sus habitantes y autoridades.